Este tiempo es el tiempo de la vida terrena y éste es para cada uno "El tiempo propicio", en el cual hay que trabajar arduamente para cooperar con la gracia a la propia santificación, pasado este tiempo, ya no habrá otro y el tiempo mal empleado se ha perdido para siempre.
En la eternidad viviremos de acuerdo al grado de amor alcanzado en el tiempo. Por eso saber aprovecharlo, no tan solo es necesario sino urgente.
La vida es muy corta para desperdiciarla en pleitos, para dejar que el egoísmo nos domine, no vale la pena dejar que nuestro corazón se enferme y se llene de malos sentimiento, de amargura e infelicidad. No fuimos creados para ser esclavos y cosechar la infelicidad a la que nos llevan. Fuimos creados para ser felices, aquí durante el tiempo terreno y luego en la eternidad con nuestro Padre Creador.
Cada día que vivimos, es una moneda que nos regala para gastarla en favor de todo lo que es bueno para cada uno de nosotros y de nuestros hermanos.
Demos gracias a Dios por el tiempo que nos regala cada día que pasa, por sus bendiciones, por la vida, por el amor que recibimos de Él a través de los demás, por su presencia, por ser como son, por existir y por su afecto y compañía.
VIVAMOS EL PRESENTE CON INTENSIDAD, ALEGRÍA Y ESPERANZA. FELIZ AÑO NUEVO 2014.
